“Un PERTE autonómico ayudaría a garantizar el progreso de la economía industrial valenciana”

Alicia Andreu es investigadora senior del ITC-AICE.

La Comunitat Valenciana presenta serios problemas de estrés hídrico en muchas de sus áreas y tiene problemas en la calidad de muchas de sus masas de agua subterráneas, siendo ésta la principal fuente de suministro en algunas zonas. Además, las previsiones de cambio climático en nuestra región establecen una disminución de los recursos hídricos disponibles en los próximos años entre un 12 y 20%. Esto provocará que se compita por el recurso desde los sectores económicos industriales, la producción agrícola y el consumo humano.

Desde el punto de vista industrial, la Comunitat cuenta con sectores muy arraigados y con gran impacto económico, que tienen consumos intensivos de agua en sus procesos y son:

• Sector químico: España representa algo más del 7% del sector químico de la Unión Europea y se encuentra principalmente ubicado en Cataluña, Madrid, Andalucía y Valencia (14% del total nacional).
• Sector de la construcción (centrado en el cerámico): España es el quinto productor mundial y el 83% de las empresas están ubicadas en Castellón, representando en la actualidad el segundo sector industrial en la economía valenciana.
• Sector agroalimentario: España se sitúa entre los 10 primeros productores de cítricos, frutas y hortalizas. La citricultura española, centrada en la Comunitat Valenciana, produce cerca del 65% de los cítricos de toda España.
• Sector textil: Existen más de 2.000 empresas de la industria textil en la CV, representando el 15% del total nacional. Dentro de la industria textil destacan las fábricas dedicadas a la preparación e hilado de fibras textiles (37% CV/España), así como a la producción de tejidos textiles (35%).
• Sector del calzado: la Comunitat Valenciana es la primera región española productora y exportadora de calzado de España, cuyos principales núcleos de actividad están en la provincia de Alicante, (Elche, Elda y Villena) y en la Vall d’Uixó en Castellón. Sus cifras industriales representan un 3,4% del total industrial valenciana. De hecho, el calzado y componentes son el quinto grupo de productos valencianos más importantes en la exportación de la Comunitat Valenciana, concentrando el 8% de las empresas industriales y del empleo total en la industria valencianas.

Estos sectores industriales son claves para la economía valenciana, con gran consumo de agua y por tanto generadores de aguas residuales. La industria compite con el sector agrícola y urbano por la disponibilidad del agua, viéndose muchas veces limitado su crecimiento por la limitación dotacional de agua en algunas áreas valencianas donde se asientan estos sectores industriales, como la Vall d’Uixó o sur de Alicante.

Por el contrario, la Comunitat Valenciana dispone de 484 EDARs (EPSAR,2020) con un volumen de caudal tratado de 464 hm3/año, de los que sólo se reutilizan 120,15 hm3 (25,90 % del volumen depurado). Por ello, estos datos arrojan una clara evidencia de la necesidad de reutilizar agua y generar una fuente de agua alternativa apta para los sectores industriales valencianos consumidores de agua.

Sin embargo, no es una tarea sencilla, aunque pueda ser viable técnicamente la reutilización de agua tratada en EDARs, hay que adecuar las aguas a las necesidades de calidad de los sectores industriales y hacer una reforma integral de su gestión del agua en nuestra comunidad.  Por este motivo, es necesario articular un PERTE autonómico en materia de agua de y medio ambiente que garantice el progreso y futuro de la economía industrial valenciana.

Como he venido interrelacionando en la cuestión anterior, las líneas prioritarias de actuación deben centrarse en la producción de fuentes de agua alternativa para lo que es necesario impulsar la reutilización de agua de las EDAR. Asimismo, también debemos recuperar los volúmenes de aguas tratados en las EDAR para uso directo y almacenarlo en acuíferos lo que permitiría su recarga.